El concierto se desarrolla en formato Cuarteto con la guitarra flamenca como hilo conductor de un espectáculo que fusiona las composiciones propias de Raul Olivar con la tradición del cante y el baile flamenco, además de la riqueza musical que ofrecen la percusión y el bajo eléctrico.
Esta riqueza musical y visual abierta a la modernidad del arte flamenco en sus tres vertientes (toque, cante y baile) y al respeto por la tradición se desarrolla con la interpretación de diferentes estilos o palos flamencos de una manera muy personal, la cual ha llevado a Raul Olivar a ser un guitarrista con un amplio bagaje musical nacional e internacional.