Un divertidísimo viaje al circolatorio (o labocircorio) para jugar con ácidos, bases, y con todo aquello que suceda entre la interacción de nuestros circocientíficos y el público: siempre atentos, Aurora Ribosoma y Armando Neutrino aprovechan cualquier situación para llevar a los espectadores al labocircorio (o circolatorio), incluso a aquellos que por su mayoría de edad creen estar a salvo de salir a escena en un espectáculo familiar.
Un espectáculo donde grandes y pequeños van a disfrutar en torno a la ciencia.